Add parallel Print Page Options

30 »Hombre mortal, tu pueblo está murmurando detrás de tu espalda. Ellos hablan mal de ti en sus casas y murmuran en las puertas diciendo: “¡Vengan, tengamos un poco de diversión! ¡Vayamos para que él nos cuente lo que el Señor mismo quiere comunicarnos!”. 31 Así que vienen como si fueran sinceros y se sientan ante ti a escucharte. ¡Pero ellos no tienen ninguna intención de hacer lo que yo les diga! Hablan dulcemente de amar al Señor, pero con sus cabezas están pensando sólo en el robo. 32 Eres para ellos un entretenimiento, como alguien que canta lindas canciones con una hermosa voz o toca bien un instrumento. ¡Ellos oyen lo que dices pero no prestan atención a ello!

Read full chapter