Add parallel Print Page Options

82 Salmo de Asaph. DIOS está en la reunión de los dioses; En medio de los dioses juzga.

¿Hasta cuándo juzgaréis injustamente, Y aceptaréis las personas de los impíos? (Selah.)

Defended al pobre y al huérfano: Haced justicia al afligido y al menesteroso.

Librad al afligido y al necesitado: Libradlo de mano de los impíos.

No saben, no entienden, Andan en tinieblas: Vacilan todos los cimientos de la tierra.

Yo dije: Vosotros sois dioses. E hijos todos vosotros del Altísimo.

Empero como hombres moriréis. Y caeréis como cualquiera de los tiranos.

Levántate, oh Dios, juzga la tierra: Porque tú heredarás en todas las gentes.

83 Canción: Salmo de Asaph. OH Dios no tengas silencio: No calles, oh Dios, ni te estés quieto.

Porque he aquí que braman tus enemigos; Y tus aborrecedores han alzado cabeza.

Sobre tu pueblo han consultado astuta y secretamente, Y han entrado en consejo contra tus escondidos.

Han dicho: Venid, y cortémoslos de ser pueblo, Y no haya más memoria del nombre de Israel.

Por esto han conspirado de corazón á una, Contra ti han hecho liga;

Los pabellones de los Idumeos y de los Ismaelitas, Moab y los Agarenos;

Gebal, y Ammón, y Amalec; Los Filisteos con los habitadores de Tiro.

También el Assur se ha juntado con ellos: Son por brazo á los hijos de Lot. (Selah.)

Hazles como á Madián; Como á Sísara, como á Jabín en el arroyo de Cisón;

10 Que perecieron en Endor, Fueron hechos muladar de la tierra.

11 Pon á ellos y á sus capitanes como á Oreb y como á Zeeb; Y como á Zeba y como á Zalmunna, á todos sus príncipes;

12 Que han dicho: Heredemos para nosotros Las moradas de Dios.

13 Dios mío, ponlos como á torbellinos; Como á hojarascas delante del viento.

14 Como fuego que quema el monte, Como llama que abrasa las breñas.

15 Persíguelos así con tu tempestad, Y asómbralos con tu torbellino.

16 Llena sus rostros de vergüenza; Y busquen tu nombre, oh Jehová.

17 Sean afrentados y turbados para siempre; Y sean deshonrados, y perezcan.

18 Y conozcan que tu nombre es JEHOVA; Tú solo Altísimo sobre toda la tierra.

84 Al Músico principal: sobre Gittith: Salmo para los hijos de Coré. ­CUAN amables son tus moradas, oh Jehová de los ejércitos!

Codicia y aun ardientemente desea mi alma los atrios de Jehová: Mi corazón y mi carne cantan al Dios vivo.

Aun el gorrión halla casa, Y la golondrina nido para sí, donde ponga sus pollos En tus altares, oh Jehová de los ejércitos, Rey mío, y Dios mío.

Bienaventurados los que habitan en tu casa: Perpetuamente te alabarán (Selah.)

Bienaventurado el hombre que tiene su fortaleza en ti; En cuyo corazón están tus caminos.

Atravesando el valle de Baca pónenle por fuente, Cuando la lluvia llena los estanques.

Irán de fortaleza en fortaleza, Verán á Dios en Sión.

Jehová Dios de los ejércitos, oye mi oración: Escucha, oh Dios de Jacob (Selah.)

Mira, oh Dios, escudo nuestro, Y pon los ojos en el rostro de tu ungido.

10 Porque mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos: Escogería antes estar á la puerta de la casa de mi Dios, Que habitar en las moradas de maldad.

11 Porque sol y escudo es Jehová Dios: Gracia y gloria dará Jehová: No quitará el bien á los que en integridad andan.

12 Jehová de los ejércitos, Dichoso el hombre que en ti confía.

85 Al Músico principal: Salmo para los hijos de Coré. FUISTE propicio á tu tierra, oh Jehová: Volviste la cautividad de Jacob.

Perdonaste la iniquidad de tu pueblo; Todos los pecados de ellos cubriste. (Selah.)

Dejaste toda tu saña: Te volviste de la ira de tu furor.

Vuélvenos, oh Dios, salud nuestra, Y haz cesar tu ira de sobre nosotros.

¿Estarás enojado contra nosotros para siempre? ¿Extenderás tu ira de generación en generación?

¿No volverás tú á darnos vida, Y tu pueblo se alegrará en ti?

Muéstranos, oh Jehová, tu misericordia, Y danos tu salud.

Escucharé lo que hablará el Dios Jehová: Porque hablará paz á su pueblo y á sus santos, Para que no se conviertan á la locura.

Ciertamente cercana está su salud á los que le temen; Para que habite la gloria en nuestra tierra.

10 La misericordia y la verdad se encontraron: La justicia y la paz se besaron.

11 La verdad brotará de la tierra; Y la justicia mirará desde los cielos.

12 Jehová dará también el bien; Y nuestra tierra dará su fruto.

13 La justicia irá delante de él; Y sus pasos pondrá en camino.

86 Oración de David. INCLINA, oh Jehová, tu oído, y óyeme; Porque estoy afligido y menesteroso.

Guarda mi alma, porque soy pío: Salva tú, oh Dios mío, á tu siervo que en ti confía.

Ten misericordia de mí, oh Jehová: Porque á ti clamo todo el día.

Alegra el alma de tu siervo: Porque á ti, oh Señor, levanto mi alma.

Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, Y grande en misericordia para con todos los que te invocan.

Escucha, oh Jehová, mi oración, Y está atento á la voz de mis ruegos.

En el día de mi angustia te llamaré: Porque tú me respondes.

Oh Señor, ninguno hay como tú entre los dioses, Ni obras que igualen tus obras.

Todas las gentes que hiciste vendrán y se humillarán delante de ti, Señor; Y glorificarán tu nombre.

10 Porque tú eres grande, y hacedor de maravillas: Tú solo eres Dios.

11 Enséñame, oh Jehová, tu camino; caminaré yo en tu verdad: Consolida mi corazón para que tema tu nombre.

12 Te alabaré, oh Jehová Dios mío, con todo mi corazón; Y glorificaré tu nombre para siempre.

13 Porque tu misericordia es grande para conmigo; Y has librado mi alma del hoyo profundo.

14 Oh Dios, soberbios se levantaron contra mí, Y conspiración de fuertes ha buscado mi alma, Y no te pusieron delante de sí.

15 Mas tú, Señor, Dios misericordioso y clemente, Lento para la ira, y grande en misericordia y verdad;

16 Mírame, y ten misericordia de mí: Da tu fortaleza á tu siervo, Y guarda al hijo de tu sierva.

17 Haz conmigo señal para bien, Y veánla los que me aborrecen, y sean avergonzados; Porque tú, Jehová, me ayudaste, y me consolaste.

Amonestación contra los juicios injustos

Salmo de Asaf.

82 Dios está en la reunión de los dioses;

En medio de los dioses juzga.

¿Hasta cuándo juzgaréis injustamente,

Y aceptaréis las personas de los impíos? Selah

Defended al débil y al huérfano;

Haced justicia al afligido y al menesteroso.

Librad al afligido y al necesitado;

Libradlo de mano de los impíos.

No saben, no entienden,

Andan en tinieblas;

Tiemblan todos los cimientos de la tierra.

Yo dije: Vosotros sois dioses,(A)

Y todos vosotros hijos del Altísimo;

Pero como hombres moriréis,

Y como cualquiera de los príncipes caeréis.

Levántate, oh Dios, juzga la tierra;

Porque tú heredarás todas las naciones.

Plegaria pidiendo la destrucción de los enemigos de Israel

Cántico. Salmo de Asaf.

83 Oh Dios, no guardes silencio;

No calles, oh Dios, ni te estés quieto.

Porque he aquí que rugen tus enemigos,

Y los que te aborrecen alzan cabeza.

Contra tu pueblo han consultado astuta y secretamente,

Y han entrado en consejo contra tus protegidos.

Han dicho: Venid, y destruyámoslos para que no sean nación,

Y no haya más memoria del nombre de Israel.

Porque se confabulan de corazón a una,

Contra ti han hecho alianza

Las tiendas de los edomitas y de los ismaelitas,

Moab y los agarenos;

Gebal, Amón y Amalec,

Los filisteos y los habitantes de Tiro.

También el asirio se ha juntado con ellos;

Sirven de brazo a los hijos de Lot. Selah

Hazles como a Madián,(B)

Como a Sísara, como a Jabín en el arroyo de Cisón;(C)

10 Que perecieron en Endor,

Fueron hechos como estiércol para la tierra.

11 Pon a sus capitanes como a Oreb y a Zeeb;(D)

Como a Zeba y a Zalmuna(E) a todos sus príncipes,

12 Que han dicho: Heredemos para nosotros

Las moradas de Dios.

13 Dios mío, ponlos como torbellinos,

Como hojarascas delante del viento,

14 Como fuego que quema el monte,

Como llama que abrasa el bosque.

15 Persíguelos así con tu tempestad,

Y atérralos con tu torbellino.

16 Llena sus rostros de vergüenza,

Y busquen tu nombre, oh Jehová.

17 Sean afrentados y turbados para siempre;

Sean deshonrados, y perezcan.

18 Y conozcan que tu nombre es Jehová;

Tú solo Altísimo sobre toda la tierra.

Anhelo por la casa de Dios

Al músico principal; sobre Gitit. Salmo para los hijos de Coré.

84 ¡Cuán amables son tus moradas, oh Jehová de los ejércitos!

Anhela mi alma y aun ardientemente desea los atrios de Jehová;

Mi corazón y mi carne cantan al Dios vivo.

Aun el gorrión halla casa,

Y la golondrina nido para sí, donde ponga sus polluelos,

Cerca de tus altares, oh Jehová de los ejércitos,

Rey mío, y Dios mío.

Bienaventurados los que habitan en tu casa;

Perpetuamente te alabarán. Selah

Bienaventurado el hombre que tiene en ti sus fuerzas,

En cuyo corazón están tus caminos.

Atravesando el valle de lágrimas lo cambian en fuente,

Cuando la lluvia llena los estanques.

Irán de poder en poder;

Verán a Dios en Sion.

Jehová Dios de los ejércitos, oye mi oración;

Escucha, oh Dios de Jacob. Selah

Mira, oh Dios, escudo nuestro,

Y pon los ojos en el rostro de tu ungido.

10 Porque mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos.

Escogería antes estar a la puerta de la casa de mi Dios,

Que habitar en las moradas de maldad.

11 Porque sol y escudo es Jehová Dios;

Gracia y gloria dará Jehová.

No quitará el bien a los que andan en integridad.

12 Jehová de los ejércitos,

Dichoso el hombre que en ti confía.

Súplica por la misericordia de Dios sobre Israel

Al músico principal. Salmo para los hijos de Coré.

85 Fuiste propicio a tu tierra, oh Jehová;

Volviste la cautividad de Jacob.

Perdonaste la iniquidad de tu pueblo;

Todos los pecados de ellos cubriste. Selah

Reprimiste todo tu enojo;

Te apartaste del ardor de tu ira.

Restáuranos, oh Dios de nuestra salvación,

Y haz cesar tu ira de sobre nosotros.

¿Estarás enojado contra nosotros para siempre?

¿Extenderás tu ira de generación en generación?

¿No volverás a darnos vida,

Para que tu pueblo se regocije en ti?

Muéstranos, oh Jehová, tu misericordia,

Y danos tu salvación.

Escucharé lo que hablará Jehová Dios;

Porque hablará paz a su pueblo y a sus santos,

Para que no se vuelvan a la locura.

Ciertamente cercana está su salvación a los que le temen,

Para que habite la gloria en nuestra tierra.

10 La misericordia y la verdad se encontraron;

La justicia y la paz se besaron.

11 La verdad brotará de la tierra,

Y la justicia mirará desde los cielos.

12 Jehová dará también el bien,

Y nuestra tierra dará su fruto.

13 La justicia irá delante de él,

Y sus pasos nos pondrá por camino.

Oración pidiendo la continuada misericordia de Dios

Oración de David.

86 Inclina, oh Jehová, tu oído, y escúchame,

Porque estoy afligido y menesteroso.

Guarda mi alma, porque soy piadoso;

Salva tú, oh Dios mío, a tu siervo que en ti confía.

Ten misericordia de mí, oh Jehová;

Porque a ti clamo todo el día.

Alegra el alma de tu siervo,

Porque a ti, oh Señor, levanto mi alma.

Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador,

Y grande en misericordia para con todos los que te invocan.

Escucha, oh Jehová, mi oración,

Y está atento a la voz de mis ruegos.

En el día de mi angustia te llamaré,

Porque tú me respondes.

Oh Señor, ninguno hay como tú entre los dioses,

Ni obras que igualen tus obras.

Todas las naciones que hiciste vendrán y adorarán delante de ti, Señor,

Y glorificarán tu nombre.(F)

10 Porque tú eres grande, y hacedor de maravillas;

Solo tú eres Dios.

11 Enséñame, oh Jehová, tu camino; caminaré yo en tu verdad;

Afirma mi corazón para que tema tu nombre.

12 Te alabaré, oh Jehová Dios mío, con todo mi corazón,

Y glorificaré tu nombre para siempre.

13 Porque tu misericordia es grande para conmigo,

Y has librado mi alma de las profundidades del Seol.

14 Oh Dios, los soberbios se levantaron contra mí,

Y conspiración de violentos ha buscado mi vida,

Y no te pusieron delante de sí.

15 Mas tú, Señor, Dios misericordioso y clemente,

Lento para la ira, y grande en misericordia y verdad,

16 Mírame, y ten misericordia de mí;

Da tu poder a tu siervo,

Y guarda al hijo de tu sierva.

17 Haz conmigo señal para bien,

Y véanla los que me aborrecen, y sean avergonzados;

Porque tú, Jehová, me ayudaste y me consolaste.