Add parallel Print Page Options

¡Cuán preciosa es, oh Dios, Tu misericordia(A)!
Por eso los hijos de los hombres se refugian a la sombra de Tus alas(B).
Se sacian de la abundancia de Tu casa(C),
Y les das a beber del río de Tus delicias(D).
Porque en Ti está la fuente de la vida(E);
En Tu luz vemos la luz.

Read full chapter